Por Maggi Dávila
Difícil. Es como describen, medios de comunicación feministas, organizaciones sociales y defensoras de derechos humanos este momento de la historia. Un hombre blanco con cargos de violación y crimen, es el presidente de uno de los países más importantes del mundo, significando para las mujeres; mayor censura y vigilancia, restricciones ante la opinión pública, miedo a la denuncia, porque si un violador es presidente, muchas mujeres tendrán miedo de denunciar públicamente a sus agresores. Las limitaciones en temas de salud sexual y reproductiva serán evidentes, habrá menos acceso a métodos anticonceptivos en todo el mundo, y mayor precariedad en el sistema de salud, sobre todo cuando las emergencias tengan que ver con aborto. Todo esto representa el regreso de Donald Trump a Washington, DC, como el 47º presidente de los Estados Unidos.
Miedo. Es el sentimiento que sintio la activista feminista nicaragüense, Lucero, al conocer los resultados de las elecciones. “Para mí su derrota (de Kamala Harris) representa el odio que existe hacia nosotras las mujeres, al cambio, a las libertades, al color de piel, a la procedencia, a las nuevas ideas, a la justicia y a la democracia, pero también su derrota representa la desinformación que su contrincante (Donald Trump) se esforzó en esparcir antes de proponer”. Sin duda las mujeres siguen representando una amenaza para los hombres.
Mujeres del activismo, como Lucero se identificaron con la propuesta de la candidata Harris, quienes aseguran fue basada en derecho y una campaña con menos tiempo de ejecución que Trump y para la filósofa y feminista española, Ana de Miguel, recuerda que la cultura del Zeus violador sigue, por desgracia, más presente que nunca.
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca es uno de los mayores retrocesos a los derechos humanos, un hombre que representa todos los valores patriarcales, elegido por el pueblo a pesar de su misoginia personal y política, demostrando que las mujeres siguen siendo vistas como ciudadanas de segunda categoría en las democracias occidentales, en esas que se hacen llamar igualitarias.
La mayor parte del voto popular que ganó Trump fue de hombres blancos y de hombres latinos con ideologías religiosas. Esta victoria de Trump, según Adam Nagourney para The New York Times, es la segunda de sus tres candidaturas a la presidencia. En ambas victorias, ha derrotado a una mujer, lo que sugiere una vez más que a muchos votantes les cuesta imaginar a una mujer en el Despacho Oval, coincidiendo con las declaración de Lucero; “entre quienes lo eligieron está la comunidad hispana, especialmente hombres” que prefieren enfocarse en tener dinero puesto que ellos no tienen que pelear por sus derechos. Es decir, Estados Unidos todavía no está preparado para aceptar a una mujer de raza negra como Presidenta de la nación.
ABORTO Y DERECHOS DE LA COMUNIDAD LGBTQIA+
En materia de aborto, tras la anulación de la sentencia Roe versus Wade (la ley que daba derecho al aborto en todo el país) en 2022 varios estados han impuesto sereveras restricciones e incluso prohibir completamente el acceso al aborto. Trump apoyaba esta idea, pero de manera repentina, un mes antes del día de las elecciones, optó por no tomar una postura clara y dijo que la decisión debe quedar en cada estado.
Cuando Trump fue presidente en su primer mandato, prohibió que las personas trans formarán parte del ejército. Ahora, con su reelección, ha prometido medidas todavía más restrictivas que podría afectar grandemente la ley Equality Act, que se encarga de proteger los derechos de la comunidad LGBTQIA+. Algunos expertos comentan que existe un riesgo real de que los derechos sobre el matrimonio y a la no discriminación se vean seriamente comprometidos.
TRUMP, LA AMENAZA MÁS GRANDE PARA LOS INMIGRANTES
La marca política de Trump es la imigración. Desde su primer campaña política en 2016 puso a la inmigración en el centro de su discurso político y en esta última campaña prometió una deportación masiva,- algo logísticamente difícil de aplicar y que demanda de mucho recurso económico – , sin embargo, la mano dura en la frontera sí está garantizada, con la intención de no dejar entrar a ningún inmigrante irregular y continuar con la construcción del muro.
El activista político por los derechos de los inmigrantes, Carlos Eduardo Espina, comenta que a pesar que Donald Trump prometió muchas cosas en contra de los inmigrantes, será difícil que pueda cumplir con todo o tratar de hacerlo inmediatamente como él propone, puesto que el sistema de inmigración requiere de un trabajo largo y extenso, y no es algo que el presidente pueda hacer con una simple orden ejecutiva.
La situación particularmente para las personas que tienen TPS, DACA, Parole Humanitario, están en proceso de asilo o no tienen ningún estatus legal, pueden tornarse más complejas, asegura Espina. Trump ha reafirmado que su prioridad es la deportación a las personas que tengan uno de los procesos antes mencionado, aunque otros expertos comentan que es muy difícil que lo haga a como ha prometido, Se calcula que mantener un plan de deportaciones masivas como el que propone, tiene un costo político y financiero muy alto, de hasta $110,000 millones, según información publicada en BBC NEWS MUNDO.
RETROCESOS EN TEMAS DE DERECHOS HUMANOS
En Estados Unidos, se encuentran residiendo defensoras de derechos humanos centroamericanas, que debido a su labor criminalizada en sus países de orígenes, decidieron migrar. “Me siento triste y con mucha decepción, nadie está en este país por placer, venimos huyendo de dictaduras, de pobrezas y hambre”, comenta Cristiana Huerta, Defensora de Derechos humanos.
Bajo la administración de Joe Biden las defensoras sintieron cierta seguridad y empatía con la situación de Nicaragua, “no hay que olvidar que se logró la liberación de cientos de presos y presas de conciencia que estaban bajo el régimen de Daniel Ortega”. En este momento las poblaciones vulnerables siguen siendo las menos favorecidas en las contiendas políticas, pues las personas que tienen un estatus irregular, sienten amenazas de redadas masivas, y a esto se le suma el severo discurso de odio contra los migrantes que exacerba la violencia. “Estoy cansada de tanto machismo y misoginia sobre los cuerpos de las mujeres, ¿Cuándo vamos a sentirnos realmente seguras?”, finaliza.
Son muchas las emociones y opiniones en torno a la victoria de Trump: “sentí que mi cuerpo volvió a reproducir el cassette de miedo, frustración y tristeza que me “sonó” en Nicaragua, cuando pensábamos que ya casi sacábamos al violador de Ortega y no pasó. Misma derrota pero en diferente país, al parecer está “rola” no pasa de moda. Llegué a Estados Unidos huyendo de una dictadura que nos quitó hasta el derecho a expresarnos, perdí esas cosas que solo quienes migramos conocemos y gané la esperanza de comenzar de nuevo bajo el recibimiento que me dio la administración actual de este país”. Por ahora Lucero se refugia en las palabras de Kamala, en su discurso de aceptación de los resultados: “ En la oscuridad se pueden ver las estrellas”
Significado de las siguientes siglas en inglés
- TPS: Programa de Protección Temporal
- DACA: Acción Diferida para los Llegados en la Infancia